Por medio de la “Portaria” 216, la Empresa Brasil de Comunicación (EBC) unificó el canal público TV Brasil con la emisora gubernamental NBR, en una decisión que marca el fin de la TV pública en el país al quitarle la independencia del gobierno a EBC.
La iniciativa fue repudiada por organizaciones sociales, universidades y periodistas que adhirieron al comunicado elaborado por el Frente en Defensa de EBC y de la Comunicación Pública en conjunto con el Foro Nacional por la Democratización de las Comunicaciones (FNDC).
“En la práctica, al juntar dos emisoras mezclando programaciones con finalidades distintas en una sola, el gobierno entierra el proyecto de comunicación pública con foco en el ciudadano y regido por la pluralidad, diversidad e independencia de contenido”, señala el comunicado.
Además explica que “el acto, que ya había sido anunciado por el gobierno hace algunas semanas constituye una flagrante violación del principio constitucional de complementariedad entre los sistemas público, privado y estatal de comunicación, expresado en el artículo 223 de la Carta Magna… Se trata de un verdadero avasallamiento de la emisora por el gobierno de Jair Bolsonaro, en la intención de crear una mera agencia de propaganda gubernamental”.
“A este episodio de desmontaje, se juntan otros ataques que EBC viene sufriendo en los últimos años, que incluyen la extinción del Consejo Curador, colegiado que garantizaba la participación de la sociedad en la definición de la programación de las emisoras públicas, así como la eliminación del mandato del director- presidente de la empresa, mecanismo que aseguraba mayor autonomía en relación a los gobiernos”, detalla el comunicado.