Blanco destacó el "orgullo", tanto del Gobierno como de gran parte de la opinión pública, por el nuevo rumbo emprendido por la Corporación hace siete años. "Sólo hago votos para que pase lo que pase el 20-N, [RTVE] continúe por esa senda de profesionalidad, independencia y neutralidad que ha caracterizado esta etapa. Si no, sería una vuelta atrás lamentable", afirmó el ministro.El vicesecretario general del PSOE también se mostró partidario de "reflexionar" sobre el origen de algunas televisiones autonómicas que hoy atraviesan una situación económica complicada. Para Blanco, es fundamental diferenciar entre las autonomías que tienen lengua propia de aquellas que no lo tienen, ya que la "dimensión" que adquiere un canal autonómico en una u otra región es muy distinta."Al amparo de las televisiones autonómicas, se suceden una serie de gastos que probablemente sean sobredimensionados en una situación económica como la que tenemos", denunció el ministro. Aunque no se mostró partidario de "cerrar" ningún medio de comunicación, Blanco abogó por "redimensionar" las teles ya existentes. Así de podrían "optimizar los recursos, concentrar la producción y ofrecer calidad y buenos productos a los telespectadores con menor coste", propuso el ministro.
Periodismo y democracia
Durante la clausura de una jornada sobre periodismo organizada por la Asociación de Periodistas Europeos, el titular de Fomento sostuvo que "no hay democracia sin periodistas", ya que "el periodismo y la libertad de expresión están en la base del sistema democrático".A juicio de Blanco, la prensa debe "ser vigilante" con el poder, pero sin olvidar nunca su "ética" profesional. En su opinión, la "credibilidad" es el valor que más puede contribuir a garantizar el futuro del oficio.